El Cervecero volvió ayer a los entrenamientos luego del amistoso jugado el sábado ante Estudiantes de La Plata en City Bell. La vuelta al trabajo tuvo una baja sensible la del lateral Ismael Quílez que sufrió un desgarro en el aductor izquierdo y tendrá para tres semanas de recuperación por lo que se perderá los primeros tres partidos (Boca, Tigre y All Boys). Además estuvieron ausentes en la primera práctica de la semana el arquero Emanuel Trípodi y el delantero Cristián Insaurralde, ambos con permiso especial otorgado por el cuerpo técnico. La tarea se inicó en el gimnasio del estadio con un circuito de fuerza y luego se trasladó a la cancha auxiliar, donde se hizo una tarea física que me mezcló con un trabajo técnico. El plantel se dividió en cuatro grupos, dos de ocho jugadores y dos de siete. Se realizaron dos tareas: mientras dos grupos se enfrentaban con fútbol en espacios reducidos dentro de un cuadrado sin arcos, los otros dos hacían una tarea aeróbica, con pasadas de seiscientos metros alrededor del anexo. Después se invirtieron las actividades. Mientras que Pablo Garnier, Martín Giménez quienes fueron operados de los ligamentos cruzados de la rodilla derecha y Miguel Caneo del tendón de Aquiles derecho, hicieron ejercicios de rehabilitación.
Con Boca a la tarde
El partido por la primera fecha del Torneo Final entre Boca-Quilmes, se disputará el sábado 9 de febrero a las 19.15.
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