Chirola, como el resto de sus compañeros completó una pretemporada muy dura en Mar del Plata, a la que pretende absorber toda su utilidad para cuando empiece a rodar la pelota y haya puntos en juego.
"Hay que aguantar los 20 partidos que tenemos por delante, nos espera un torneo muy duro y todos sabemos lo que nos estamos jugando. El sueño es mantenernos en primera y para eso debemos sacrificarnos, porque nada viene de arriba", aseguró tras los entrenamientos en la Costa Atlántica.
De lo trabajado en Mar del Plata destacó: "lo mejor fue el trabajo y la conciencia que tuvimos en cada entrenamiento; es fundamental estar bien en lo físico y poder estar en las mejores condiciones durante los 90 minutos".
Se fue satisfecho y marcó algunas virtudes tácticas que recuperó el equipo en este receso. "Estoy contento por el trabajo que hicimos durante toda la pretemporada, fue exigente y la terminamos jugando dos partidos en los últimos días que nos sirvió mucho. El equipo está presionando mucho y por momentos también jugamos bien y vamos por el camino que queremos todos".
Quilmes jugó dos partidos amistosos ante conjunto locales como Unión de Mar del Plata (2-0) y Defensores de Batán (1-0), pero esta etapa se profundizará a partir de esta semana; aún quedan tres por delante antes de verle la cara a Boca, en la Bombonera.
Esta etapa de preparación será mucho más extensa que la que tuvo el equipo para jugar el torneo. "En el receso pasado tuvimos poco tiempo de trabajo, veníamos de un ascenso, solo fueron cuatro semanas. Ahora tuvimos mucho más tiempo y el profesor nos dio bastante".
No dudó que transitarán por la misma ruta hasta llegar al 9 de febrero: "estas semanas que nos quedan seguiremos trabajando y mejorando pero siempre poniendo fuerte las piernas para cuando nos toque jugar no tengamos ningún tipo de problemas y estemos todavía más fuertes ante todos los rivales".
Retroceder nunca
Sebastián Romero no quiere ni habla de la Primera B Nacional, categoría que jugó por única vez la temporada pasada cuando consiguió subir con Quilmes. "Me pareció durísimo y me costó jugarlo. Por suerte se dio el ascenso y por eso no hay que volver más a la B. Tenemos que disfrutar de estar en Primera y defenderlo a morir. Sabemos que el camino para ascender fue muy duro; nos tenemos que matar para dejar a Quilmes en Primera, que es el lugar donde este club merece estar por su gente, por la institución, por la historia que tiene y por nosotros que nos sacrificamos para lograrlo; poder conseguir la permanencia sería un gran regalo para todos".
El volante Cervecero está convencido que habrá una competencia pareja en la lucha por la permanencia. "No va a ser fácil pero eso siempre lo supimos, nosotros estamos jugando por mantenernos en Primera desde la primera fecha. Pero yo tengo en claro que para nuestros rivales tampoco será fácil jugar por quedarse en la categoría, porque el que nos quiera ganar va a tener que correr mucho más que nosotros y ser mejores. Nosotros no le vamos a regalar los puntos a nadie y cuando nos toque perder será porque nos superaron".
Fuente: Diario El Sol
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