Ahora sí se nota la ansiedad lógica que despierta todo comienzo. Más si se trata de un inicio de camino que tendrá como meta cumplir el difícil objetivo de lograr la permanencia. Quilmes inició ayer la semana previa al partido del sábado a las 19.15 ante Boca que dará inicio al Torneo Final 2013. La labor fue la habitual a todo comienzo de semana pero tratándose ya de la previa a la competencia se bajó la intensidad del trabajo. Luego de haber tenido un día de descanso los jugadores retornaron a los entrenamientos con una práctica física que se combinó con ejercicios técnicos con pelota en el campo auxiliar. El plantel se dividió en cuatro grupos, dos de seis jugadores y dos de siete. Mientras dos grupos se enfrentaron en partidos de fútbol en espacios reducidos, sin arcos y dentro de un cuadrado en la cancha principal, los otros dos grupos hicieron trabajos aeróbicos, con pasadas de cuatrocientos metros. Luego fueron rotando para hacer la misma tarea. Los dos jugadores que estuvieron ausentes fueron Cristian Lema y Sebastián Martínez, ambos con permiso especial por razones familiares. Mientras que los jugadores que tuvieron una labor diferenciada fueron Martín Giménez, operado de los ligamentos cruzados de la rodilla derecha pero que en los últimos días había sufrido una tendinitis; Miguel López, luxación en el hombro derecho e Ismael Quilez, microdesgarro en el aductor izquierdo. Además trabajaron en el gimnasio Miguel Caneo (operado del tendón de Aquiles derecho) y Pablo Garnier (operado de los ligamentos cruzados de la rodilla derecha).
Fuente: Diario El Sol
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