lunes, 12 de noviembre de 2012

"Este equipo está en la pelea"


La rompió ante Newell's. Emanuel Trípodi fue la gran figura de Quilmes, en donde se sostuvo el empate conseguido el viernes ante el conjunto rosarino. Pero no hay tiempo para distraerse y el capitán del Cervecero está metido de lleno en el objetivo que se propusieron en el inicio de la temporada. "Este equipo está en la pelea y se planta de igual a igual ante cualquiera, sea un equipo grande, el puntero o quien sea. Estamos en esta competencia para sacar puntos y llegar a los 50 y no nos vamos a dar por vencidos hasta que lo logremos", apuntó. El arquero del Cervecero confió en lo que hasta ahora mostró el equipo: "vamos por un muy buen camino y creemos que nuestra gente esta orgullosa de apoyarnos. Nada de lo que conseguimos es fácil y nos sacrificamos para lograrlo. Estamos transitando una seguidilla de partidos difíciles como el que pasó ante Newell's y los que vienen como Vélez y Racing y esperemos cosechar los puntos que necesitamos para estar todos un poco más tranquilos". Viene de tener una actuación sobresaliente con atajadas determinante de las cuales eligió "el rebote y una tapada seguida en el segundo tiempo fueron la más intensa. Hubo otra que pude sacar con el cuerpo; la pelota se mueve mucho y cuando la tenía controlada con la mano se me movió, no me dio tiempo y no me quedó otra que ponerle el pecho y que venga lo que venga". El partido ante Newell's "fue durísimo, juegan bien y por algo era el puntero. Todo lo que nos dijo Omar (por De Felippe) pasó, manejaron muy bien la pelota pero nosotros hicimos un trabajo muy bueno, fuimos sólidos en lo defensivo y tuvimos situaciones de gol. Ellos tienen muchos goles desde afuera, tocan bien y ensanchan la cancha. Pero nosotros le hicimos un partido bárbaro que lo pudimos haber ganado si entraba la de Jacobo (por Mansilla)". Trípodi fue víctima de la violencia: "en el primer tiempo me pegaron con un piedrazo en la espalda y luego otra arriba del ojo. Si me pegaba un centímetro más abajo me lo sacaba. Por eso estaba caliente con el árbitro pero en todo momento me apoyó y me dijo que un piedrazo más y nos íbamos pero estuve muy cerca de perder un ojo. La gente estaba demasiado agresiva para la situación que está viviendo el equipo".

Fuente: Diario El Sol. 

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